Volver

Ansiedad y sueño en tiempos del coronavirus

A veces la situación de incertidumbre y las preocupaciones diarias pueden producir una sensación de ansiedad cuando nos vamos a la cama, que acaba dificultando el sueño y el descanso. En este post nos preguntamos qué podemos hacer para alejar los fantasmas de la noche y conciliar el sueño de manera relajada, ahora que estamos inmersos en una preocupación común: la pandemia provocada por el SARS-CoV-2, comúnmente conocido como coronavirus.

¿Por qué no puedo conciliar el sueño con el coronavirus?

A menudo, no podemos definir con exactitud los motivos por los que no estamos tranquilos, pero lo cierto es que la sensación de inquietud que puede perseguirnos durante el día se acentúa durante la noche, y no nos deja conciliar el sueño.

La situación de incertidumbre que vivimos actualmente debido a la pandemia de la COVID-19 no ayuda. Existe temor a retomar las actividades diarias, las escuelas, universidad o el trabajo. Algunas personas temen el contagio y les preocupa volver a sus obligaciones, mientras que otras temen que sus familiares y seres queridos enfermen, perder su trabajo o no poder hacer frente a la situación económica que les ha sobrevenido.

Sea cual sea el motivo de cada uno, el coronavirus puede generar un trastorno de ansiedad en personas que anteriormente no lo habían padecido.

¿Qué es la ansiedad?

Se define la ansiedad como “una respuesta anticipatoria de un daño o desgracia futura acompañada de un sentimiento desagradable, síntomas somáticos de tensión o conductas evitativas. En condiciones normales es una señal de alerta que advierte de un peligro inminente y motiva a la persona a adoptar las medidas necesarias para enfrentarse a esa amenaza”. Esto está bien y obedece a un espíritu de supervivencia. El problema surge cuando esto sobrepasa cierta intensidad o duración, supera la capacidad adaptativa de la persona y provoca malestar o deterioro con síntomas físicos y psicológicos. Entre estos síntomas encontramos los problemas alimenticios y también de sueño. A nivel nutricional pueden aparecer los dos extremos, o la apetencia por comer a deshoras, en abundancia y alimentos de baja calidad, o no querer comer nada. Esto se observa en las personas que justifican su falta de alimentación con “tener cerrado el estómago” a consecuencia de las preocupaciones.

A nivel del sueño también se observan consecuencias importantes. Puede aparecer insomnio tanto a la hora de conciliar el sueño como en los despertares frecuentes durante la noche. Esto se traduce en una falta de descanso que tiene repercusión al día siguiente. Además, afecta a nuestros pensamientos y al ánimo para afrontar el nuevo día.

Insomnio: consecuencias para la salud

Si esto se alarga en el tiempo, puede tener otras consecuencias para la salud. Como sabemos, dormir menos de 7 horas por la noche es un factor de riesgo en hombres y mujeres para algunas enfermedades, algunas relacionadas con la salud cardiovascular. Si comparamos la prevalencia de estas patologías en personas que duermen de 7 a 8 durante la noche, se observa que es menor en comparación con personas que duermen menos.

Insomnio y ansiedad, relación con la salud

Por tanto, existe una relación entre la ansiedad, el insomnio y la salud. Las preocupaciones pueden hacernos sentir ansiosos, lo cual dificulta la obtención de un sueño reparador y esto, a su vez, prolonga un estado de preocupación que no beneficia al buen estado de salud general de la persona.

Si bien la ansiedad se puede trabajar desde muchas vertientes con los recursos necesarios, es cierto que evitar el insomnio es importante para mejorar la sintomatología de la misma, además de para la obtención de todos los beneficios conocidos de un buen descanso

Cómo combatir el insomnio

A continuación, te ofrecemos algunos trucos útiles para dormir mejor y sobrellevar la incertidumbre relacionada con el COVID-19:

  • Dejar de lado pantallas y aparatos electrónicos, así como permanecer con la luz apagada. En especial se debe evitar el teléfono móvil con el fin de seguir buscando o encontrar información y noticias relacionadas con el coronavirus que puedan seguir siendo fuente de preocupación en estos momentos.
  • Crear un buen ambiente para dormir: se consigue con una buena temperatura de la habitación, ausencia de ruidos o estruendos, y un entorno que respete el sueño y no moleste con interrupciones innecesarias.
  • Evitar consultar el reloj o el despertador mientras no se vuelve a recuperar el sueño. Lo único que se consigue es aumentar el nerviosismo y dificultar que se vuelva a conciliar el sueño.
  • Realizar ejercicios de respiración o de meditación ya que pueden ayudar a relajar la mente y el cuerpo. Esto es muy importante cuando percibimos que estamos nerviosos y nuestra respiración se vuelve mas apresurada. Debemos tomar el tiempo necesario para conseguir que esta sea lenta y pausada.
  • Si tras más de 15 minutos despierto realizando ejercicios de respiración y relajación no se consigue el objetivo, lo mejor es levantarse de la cama y cambiar de lugar para realizarlos. Si esto no funciona puedes realizar una actividad monótona que no requiera concentración fuera de la cama hasta que puedas conciliar de nuevo el sueño en ella.

¿Y si no es suficiente?

En ese caso existen profesionales médicos o farmacéuticos que podrán informarte de productos disponibles. En el mercado hay compuestos a base de doxilamina que actúan en el organismo consiguiendo crear un sueño reparador lo que hará que al levantarte te sientas mucho más descansado y con la energía suficiente para hacer el día a día más llevadero. Además, en este caso cobra mucha más importancia esta sustancia ya que actúa disminuyendo el tiempo de inicio del sueño (que se ve alargado con la ansiedad). Gracias a ella se conseguirá evitar las temidas vueltas en la cama sin poder dormir, tan frecuentes en estos casos donde las noches se vuelven muy largas.

Además, te invitamos a realizar el test del sueño que tenemos disponible aquí para saber qué clase de dormilón eres. Sólo por completarlo, recibirás una GUÍA PRÁCTICA en la que te desvelaremos los mejores lugares, consejos y técnicas para relajarte en tu día a día.

BIBLIOGRAFÍA

  1. Quiroga A, Corona AD. Trastornos de ansiedad. Fisterra. [Internet] A Coruña: Servicio de Atención Primaria San José B. Servicio Galego de Saúde. 2015 [consultado el 04 de septiembre de 2020] Disponible en: https://www.fisterra.com/guias-clinicas/trastornos-ansiedad/
  2. National Institute of Health. Los beneficios de dormir. [Internet]2013 [consultado el 05/09/2020] Disponible en: https://salud.nih.gov/articulo/los-beneficios-de-dormir/
  3. Instituto del Sueño. Insomnio. [Internet]2019[consultado el 05/09/2020] Disponible en: http://sleepobservatory.org/es/que-es-el-sueno
  4. Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios; 2011 [consultado 4/09/2020]. Disponible en: https://cima.aemps.es/cima/dochtml/ft/77517/FT_77517.html